El rey Herodes: el político de las artes oscuras

149

Os presentamos un programa más del Padre Valentín para seguir formándonos de manera amena sobre distintos personajes que aparecen en la Biblia. En este programa trataremos la figura de rey Herodes porque como dice el Padre Valentín en las Sagradas también hay sombras, hay personajes siniestros. En este caso, un antagonista en la infancia de Jesús es Herodes. Del rey Herodes como bien explica el Padre se puede decir mucho porque fue el rey más famoso de la historia de Israel. «Si me preguntáis si Herodes fue un bien o un mal rey la respuesta correcta es que sinceramente tengo que admitir que políticamente hablando fue un gran rey», explica el Padre. Es decir, Herodes ha pasado a la historia como el mejor rey de la historia de Israel. Y es que si leemos a los historiadores de la época, nadie como Herodes se embarcó en una empresa de construcción de obras públicas a tal escala, que en todo el mundo romano, en la cuenca del mediterráneo, en la misma época en la que vivió Herodes no hay ninguna provincia ni nación con un desarrollo urbanístico tan salvaje como el de Herodes.

«Construyó puertos, como el de Cesaría Marítima que todavía hoy deja a los arqueólogos impactados, reconstruyó ciudades, hizo acueductos, canalizó aguas para crear campos de cultivos. Por ejemplo, el templo de Jerusalén, el mismo que conoció Jesús, él lo amplió. De hecho, las obras del templo que inició Herodes duraron hasta la época del año 64 después de Cristo., explica el Padre Valentín. Consiguió de esta forma, que el templo fuera el edificio más grande de todo el Imperio Romano. Por ello los judíos estaban contentos con su rey. Herodes de origen no era judío, sino de una pequeña región al sur de Judá, de ahí que para satisfacer de alguna forma al pueblo hiciera toda esa política tan expansiva. Pero junto con esta parte luminosa viene otra parte oscura. La personalidad de Herodes era la de un hombre ególatra, se daba culto a sí mismo.

«Era alguien egoísta que buscaba continuamente auto afirmarse, de hecho los historiadores de la época nos hablan que mandó asesinar a varios de sus hijos, simplemente por la sospechas de que sus propios hijos les arrebataran el trono», explica el Padre. Éste es un ejemplo de como una persona puede ser políticamente impecable pero luego utiliza artes maquiavélicas y no es capaz de darse cuenta que no todo justifica los medios.