¿Qué diferencia hay entre “felices fiestas” y “feliz Navidad”?
(ACI) Mons. Héctor Aguer, Arzobispo Emérito de La Plata en Argentina, advirtió que la celebración de la Navidad “no puede ser tragada por ‘las fiestas’ en general”, pues los cristianos “festejamos el acontecimiento más grande de toda la historia humana”.
En su reflexión semanal “Claves para un Mundo Mejor”, difundida este sábado por CANAL 9, Mons. Aguer lamentó que “mucha gente dice ‘felices fiestas’ y seguro celebran la Navidad, el 24 a la noche brindan, y quizá hasta hacen una festichola”, como se conoce a las celebraciones en el hogar en Argentina.
“¿Pero saben por qué lo hacen? ¿Saben qué festejamos? Ahí está la cuestión”, señaló.
“Nosotros festejamos el acontecimiento más grande de toda la historia humana: el Nacimiento de Jesús, Hijo de Dios hecho Hombre, que ha venido para nuestra salvación”, subrayó.
El Prelado argentino destacó que “en realidad, si uno lo piensa bien, sería más impresionante festejar la Encarnación, el 25 de marzo, que es el momento en que por el anuncio del ángel el Espíritu Santo desciende sobre la Virgen María, y de un óvulo de la Virgen María se forma el cuerpo de Cristo que comienza a desarrollarse en su seno”.
“La segunda persona de la Trinidad se hace ‘carne’, se hace hombre, en el seno de María y cumple allí su ciclo de 9 meses. O sea es un embrión, es un feto y luego es un niño por nacer y es un niño que nace virginalmente en un parto misteriosamente virginal, realizado, como dice San Ignacio de Antioquía, en el silencio de Dios, en el silencio de esa noche santa Jesús está en los brazos de María y de José y es puesto en un pesebre”.
Mons. Aguer destacó que en la Navidad celebramos “la adoración de ese Niño que es Nuestro Salvador”.
“En esta Noche Santa del 24 al 25 lo que corresponde es caer de bruces delante del Pesebre para adorar al Niño Jesús”, indicó, y subrayó que “el Pesebre es el signo católico por excelencia de la Navidad”.
“¿Y ese barbudo que viene aquí, transpirando, vestido de colorado, con renos y todo eso, que viene de otra geografía? ¡Papa Noel! No, eso no tiene nada que ver con nuestra Navidad sudamericana, calurosa y católica”.
Más adelante, el Arzobispo Emérito de La Plata explicó que “la Navidad no es sólo el 24 y el 25, porque el 1° de enero es la Fiesta de Santa María Madre de Dios, cuando nos dedicamos a contemplar la maternidad divina y virginal de María, que es también una maternidad espiritual respecto de todos nosotros pues Cristo quiso que Ella fuera nuestra Madre en el orden de la gracia”.
“Luego, el 6 de enero celebramos la Epifanía del Señor, la manifestación a los Magos, pues así como Jesús se manifestó a los pastores judíos que estaban en la región, en el momento de su nacimiento, así también la inspiración de Dios hizo que unos Magos de Oriente, paganos, que no pertenecían al pueblo judío, comprendieran que había nacido el Rey y ellos fueron a reconocerlo y adorar al Rey, fueron los primeros paganos que reconocieron a Cristo como Rey y Redentor”.
Por esto, precisó, “las fiestas son, entonces, la Navidad, la Solemnidad de la Madre de Dios y la Epifanía del Señor el 6 de enero”.
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