Yannick: «Algo me arrastró a rezar ante el Sagrario cuando oí que Juan Pablo II había muerto»
Yannick es cocinero. Por su profesión tenía que trabajar todos los fines de semana, así que no podía ir a misa los domingos. Tenía unos veinte años cuando un día, mientras estaba en el trabajo, escuchó por la radio que el Papa Juan Pablo II había fallecido. Diez minutos después, anunciaron que en una iglesia próxima al restaurante donde Yannick trabajaba estaría abierta toda la noche para que la gente pudiera ir a rezar por el Pontífice. Cuando salió del trabajo sintió una necesidad imperiosa, una fuerza que le llevó a ir allí para rezar delante del Sagrario. Yannick sintió la gracia del reencuentro con Dios. «Él fue el que me reencontró, porque yo no estaba alejado», dice, «pero mi oración era solo para pedirle cosas: dame esto, haz esto por mi…»
Poco a poco volvió a ir a misa, cuando podía. Al principio una vez al mes, dos veces y luego cada vez más a menudo. Años después le diagnosticaron un cáncer y tuvieron que operarle. Lo que en principio era una intervención sencilla de dos horas se convirtió en operación de ocho horas y media. En el quirófano sucedió algo y cuando despertó, lo primero que hizo fue pedir una Biblia. Cuando habló con el médico supo algo más y su relación con Dios cambio para siempre.
Traducción: Paloma G.
©Mater Mundi TV
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