«La pérdida de trascendencia y la vida sin sentido destroza a las personas» – Rafaela Santos
En esta segunda entrega de nuestro espacio ‘Profesión y Fe’ os presentamos a la doctora Rafaela Santos, médico y neuropsiquiatra que, además de intentar ayudar todo lo que puede a sus pacientes, preside el Instituto Español de Resiliencia y la Sociedad Española de Especialistas en Estrés Postraumático y la Fundación Humanae. Ha escrito varios libros, entre ellos Levantarse y luchar, cómo superar la adversidad con la Resiliencia, y Mis raíces. Familia, motor de Resiliencia. También desarrolla una intensa actividad docente en empresas, centros educativos y organizaciones como la UME (Unidad Militar de Emergencias) o la Policía Nacional, y ahora está inmersa en buscar recursos para ayudar al personal sanitario que, tanto en el ámbito público como privado, se encuentra exhausto y al borde del precipicio tras dos años de pandemia. «No podemos dejar abandonados a los que se han ocupado de cuidar de nosotros», lamenta.
¿Por qué entrevistamos a la Dra. Santos? Porque es otro claro ejemplo de cómo se puede conciliar profesión y fe en la sociedad actual. La paridad entre su faceta profesional y sus creencias no ha supuesto nunca un problema para ella. La fórmula es simple y transparente: «La gente me conoce tal como soy, no tengo por qué esconder mi fe y respetando siempre he sido respetada».
La Dra. Santos surfea cada día sobre una frenética agenda y con una sonrisa que muy rara vez podrás ver que se borra de su cara. Su vocación médica y, en particular, su pasión por el conocimiento del cerebro humano, van de la mano con su vocación de servicio. Empecé pronto a sentir especial curiosidad por el cerebro humano y «especialmente por las heridas del alma, esas que no se ven y destruyen tantas vidas».
Desde que se levanta bien pronto por la mañana, dedica un tiempo a repasar todo lo que deberá afrontar cada día. «No es solo organizar lo que tengo que hacer hoy, es mi momento de pensar ojalá pueda ayudar a mucha gente«. Ese tiempo le recuerda, a diario, «que mi vida tiene una trascendencia, un sentido». En su trayectoria hay varios momentos clave. Uno de ellos fue conocer a Víktor Frankl (El hombre en busca de sentido). «Lo que más daño está causando a las personas hoy en día es la pérdida de trascendencia, la falta de sentido de la vida», dice la Dra. Santos. «En la sociedad en la que vivimos, intentar evitar o ignorar el sufrimiento es una lucha inútil». «Todos vamos a pesar, como poco, un par de acontecimientos traumáticos en la vida. Lo interesante es saber que la vida, llena de problemas y situaciones que no nos gustan, tiene un sentido para cada uno de nosotros», asegura.
«Cuando encuentras el sentido de tu vida, todo lo que haces tiene un propósito», afirma la Dra. Santos. Una vida al servicio de los demás tiene todo el sentido para ella, y el propósito de ayudar fortalece su espíritu. De esa forma, vive en una permanente retroalimentación entre cuerpo y alma, entre profesión y fe.
«El sufrimiento no es lo que realmente daña al ser humano. Lo que hace más daño es no encontrar sentido al sufrimiento». Por eso para Rafaela Santos «cuando se tiene fe en que existe una eternidad, todo el esfuerzo tiene un sentido y todo son ganancias, nunca se pierde nada».
La Dra. Santos recuerda que ni la felicidad ni el tenerlo todo controlarlo se pueden comprar con dinero. «Es mucho más feliz el que da que quien pretende tenerlo todo controlado». En su opinión, aportar nuestra propia capacidad de hacer el bien, de ayudar a los demás, a la sociedad, nos hace mucho más felices. «Si se construye con el bien general por encima del bien personal vamos por buen camino», dice.
Santos considera muy preocupante vivir en una sociedad sin referentes, en la que se quiere ser feliz a toda costa pero sin saber a dónde se va y sin esforzarse. «No hay cosa peor que el que busca insistentemente la felicidad y no la encuentra. Padres que quieren hijos perfectos y les sobreprotegen. En el camino les privan de aprender a fracasar, les generan miedos e inseguridades, les impiden desarrollar la tolerancia a la frustración, Se les hace muy vulnerables, porque en la vida siempre van a encontrar dificultades.». A lo largo de la vida, dice la neuropsiquiatra, «todo lo podemos superar cuando tenemos voluntad de hacerlo, ponemos empeño, esfuerzo y buscamos los caminos. Hay que ejercitar la voluntad y el esfuerzo. Todo eso forma parte de la felicidad», afirma.
Para Rafaela Santos, mujer de fe, la felicidad última y el sentido de su vida es alcanzar el cielo, ni más ni menos.
En la siguiente entrevista puedes conocer mejor a la Dra. Santos, otro buen ejemplo de cómo es posible conciliar, con pleno sentido y coherencia, profesión y fe en nuestra sociedad. ¡No te la pierdas!
Ayúdanos a seguir evangelizando
Tu aportación es esencial para que la familia de Mater Mundi TV pueda seguir creciendo
Síguenos en: Facebook | Twitter | Telegram | WhatsApp
©Mater Mundi TV
(288)
